Blonde Redhead, la perfección en escena

Mario De Cristófaro 3 octubre, 2012

Finalmente los Blonde Redhead se presentaron el sábado pasado ante un numeroso público -algo más de 600 personas- en el mítico escenario de Niceto Club. El trío neoyorquino ofreció una precisa perfomance que se prolongó por noventa minutos (incluyendo bises) con un sonido limpio y ajustado que no defraudó a sus fans. Una labor sobresaliente cumplió la vocalista y bajista Kazu Makino dueña de una voz exquisita -produjo en la audiencia la sensación de estar escuchando el disco en directo- y una fuerte personalidad y actitud en escena que se mantuvo hasta el final del concierto. Amedeo Pace en guitarras, teclados, samplers y voces tuvo un rol destacado, inclusive cuando tuvo la responsabilidad de ser el front man en un segmento del recital. Su hermano Simone, en la batería, demostró manejar los tiempos y los diferentes climas con muy buen gusto . El repertorio incluyó un repaso por temas incluídos en sus tres últimos álbums -«Penny Sparkle», «23» y «Misery is a Butterfly»-, un par de canciones inéditas y otras pertenecientes a la etapa mas temprana del trío, cuando estaban más cerca del noise y eran producidos por Steve Shelley (baterista de Sonic Youth). Un gran concierto de los Blonde Redhead que merecerían mayor reconocimiento desde la prensa especializada internacional y, al menos, algo del hype que le ofrecen habitualmente a bandas cuya calidad y creatividad dejan mucho que desear y de una repercusión efímera.